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mercredi, septembre 23, 2009

Viva la Vida

Empiezo con esta canción de Coldplay, que suena, así, en la radio para hablar de Renoir, Auguste Renoir (1840), de quien se inagura a super exposición en París, sobre su segundo periodo, prácticamente desconocido.

Esta mañana citaban unas frases suyas cuando ya tiene 72 años y es lo que ahora se llama, un anciano, pero nosotros con desprecio, con una idea de decandencia, de camino oscuro hacia la muerte. Pues para Renoir, y para muchos otros, fue una cosa muy distinta, es cuando dice: creo que empiezo a comprender algo y a saber pintar (!!!) Porque toda una vida no es suficiente para aprender a existir, a crear... Esto va en contra de las sociedades que veneran la juventud, la salud, el éxito, la inmediatez, y desprecian a los ancianos. OH, cómo deploro esto. Esas sociedades biológicas, económicas, aseptisadas. Tengo mis razones para no sentirme seducida por aquellas ciudades que se pliegan a estos modelos de sociedad. Deberíamos repetirles a los jóvenes, a manera de mantra: la vida no es suficiente para comprender y: sé paciente... y a aquelloas que sienten que poseen el mundo por tener riquezas materiales, que la riqueza no está en el exterior, por más que se lo crea, está en cada unoa de nosotroas...

Ya estoy un poco emocionada por mi viaje a Francia, primero a París, luego Toulouse, luego Normandía, Brest, il pleut toujours sur Brest... estoy ansiosa por esos esapcios de sosiego, de encuentro. Siempre me encuentro conmigo misma, y es lo que importa...

Es linda esta canción´: http://www.youtube.com/watch?v=dvgZkm1xWPE Puedo ser une gamine!!

1 commentaire:

Fernando a dit…

Quizás la clave se encuentre en resistirse a lo que parece fácil y llamativo a simple vista. Lo vano y superficial atrae y seduce a la vista pero hay que ahondar más para encontrar el verdadero valor que poseen las cosas, las personas.
Lo irónico es que la edad no da sabiduría y mucha gente con edad para saber más se comporta como si tuviera menos (por suerte lo contrario tambien se da) y la búsqueda de apariencias más juveniles a como dé lugar, oh oh, se convierte en una locura.