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mercredi, février 20, 2013

y si un día...

¿ Y si un día ya no entendemos lo que leemos, y si un día el lenguaje se vuelve a tal punto instrumental, que ya no revele otra cosa que una necesidad, que sucederá?

No sé, es una pregunta en voz alta...

Lenguaje y verdad

Hay algo que me parece fundamental en todo ejercicio de escritura, pese a que a mucha gente le suene extraño, o que la mayoría vea eso con cierto escepticismo, como una pose, nada más alejado. El gran reto es mantener una relación de verdad con lo que se escribe, al menos en mi caso es así. Yo no puedo mentir cuando escribo. Me explico, puedo inventar, hacer una ficción, pero esa ficción, esa invención que no es del todo inventada, debe estar en relación con una verdad que parece absoluta: la que plantea el texto como una forma de coherencia, de transparencia absoluta. En esa grille de fiction, aparece la autora atravesada por esas líneas de riesgo. No se puede escapar de eso, al menos, yo no,

Tal vez Venezuela me ha entrenado en ese proceso, no puedo, nunca, estar en un intercambio de frases automático, siento que lo que me apasiona, lo que me mueve, es sentir que el lenguaje revela cosas, que pone en contacto con lo más íntimo de nosotras. No puedo con la actuación. Cada reunión social donde hay que representar un rol, un estereotipo, donde hay que alejarse de ese pacto interior, me cuesta, me pesa y solo pienso en regresar a mis espacios. No siempre sucede, hay personas, varias felizmente, que permiten un diálogo directo, una compañía atenta. Hay que buscarlas y cuidarlas. No perderse en el juego de representaciones. Imagino que con tanto mensaje que recibimos del exterior, nos cuesta saber quiénes somos.... el otro día oía en la radio  (France Culture) que con el tiempo, la noción de sujeto que hemos tenido hasta ahora, ligado a un territorio y una cultura, cambiará.  Estamos en plena mutación hacia... no sé, las, los que tenemos que elegir, somos nosotroas...

el deseo es una aguja que se mueve sobre una superficie, mientras más centrada esté, creo que puede orientarse mejor...

yo sigo mi brújula...

jeudi, février 14, 2013

Todo está en contra de escribir

Haez cambiado nuestro empleo del tiempo. De pronto, tenemos muy poco tiempo para escribir. Las cosas se multiplican ad infinitum, los pliegues de la realidad parecen multiplicarse, las voces nos llegan de todas partes. Estoy en Lima, pero sigo en Venezuela y no me desprendo de Francia, ni de España, menos de México. Mi lugar es "un no lugar", como dice Marc Augé. Trato de insistir en mantener mi ritmo, me aferro a una frase de Marc Augé: magistral. Pero sé que no es suficiente. No encuentro el tiempo que tenía antes. Demasiados dispositivos, de uno solo, la computadora, he pasado a tres!!

Cambiará nuestra manera de conocer, será más elíptica, más total, seremos seres nuevos con otras formas de hablar y pensar.

Nuestra manera de conocer ha cambiado. No hay totalidades, hay fragmentos.
Estamos constantemente fragmentadoas...

más soloas.

cada vez es más intensa la sensación de la soledad de los demás en mí, mi espejo interior refleja esas soledades con más intensidad...

Necesitaba escribir esto para liberarme. Tal vez estemos más seguroas de que la verdadera libertad no existe (ese infierno de la elección) y estamos más cerca a aceptar nuestras prisiones, con docilidad, con resignación...

Pienso: el gesto de escribir es un gesto de resistencia, es la vida...

intento no inquietarme...
pero siento golpes de tambor, golpes de guerra, el tiempo se acaba y se trata del "empleo del tiempo", del lenguaje cada vez más pragmático y efímero. La literatura no es una diversión, es una conversión...




dimanche, février 03, 2013

el poder de las palabras

están las palabras y luego lo que ellas pueden cambiar dentro de nosotroas, y fuera, dentro de nosotroas, el valor que le damos a las cosas, todas nuestras interpretaciones y jerarquías. Pero, ¿qué sucede cuando las palabras escriben, al azar, y terminan produciendo un destino? Nadie tiene un destino, creo, este se escribe día a día, y nunca de forma total, sino siempre parcial, incompleta. La neurosis de escribir es tratar de completar esa parte de vida que siempre nos hace falta. Sin embargo, sucede que a veces escribimos cosas que luego vamos a vivir, como si hubiese una forma de visión de futuro, de intuición, o lo que diría, adelantarse a los hechos por una línea de causalidad, que da como resultado que varias posibilidades se unan y produzcan esa coincidencia, esa situación que antes hemos escrito, como "por azar". Tal vez, sí, quienes observamos andamos siempre con la mirada muy concentrada en los demás, cosa que a veces me produce un agotamiento extremo, pero que hace que leamos antes que nadie ciertas cosas...

más allá de tener virtudes de pitonisa, creo que es la Atención.

Tengo muchas ideas que vienen a mi cabeza, no logro ponerlas por escrito, el Facebook me fragmenta, me distrae inútilmente.

Leo las cartas de Van Gogh a su hermano Theo, sigo sus lecturas, sus análisis, su capacidad de síntesis, y de nuevo, su observación. A veces me digo, me libre de esta persona (una amistad, a veces un hombre) que solo veía generalidades, el grueso de la experiencia, nunca sus partes...

Pocos mails, algunos importantes, de amigos, de personas que también escriben, muchas veces, una obra mucho más importante que la mía. Dar nombres, no sé... a mí me gusta saber quiénes son las personas que rodean una vida, un recorrido, pero en ciertas ocasiones, puede estar fuera de lugar.

tengo varios libros por leer, el último de Yuri Herrera, que parece "sabroso" como se dice aquí, algunos ensayos, más novelas... ¿cómo hacer que las cosas no parezcan exhibicionistas, para que se mantengan en contacto con cierta verdad? No lo sé, creo que aceptar el fb es una debilidad, un haber pisado el palito que pone en peligro una parte de esa autenticidad...

a réfléchir...