lundi, avril 07, 2008
La música
Yo nunca he entendido a las personas que pueden vivir sin escuchar música. En materia de gusto en esto, soy totalemente ecléctica: no tengo ninguna noción de las cetegorías de valor, basta que una música me evoque una presencia, una sensaicón para que le dé un valor. En días pasados, fuimos a un concierto de salsa y me di cuenta que ese aspecto popular, es justamente su encanto, lo que me seduce, mucho más que otra cosa, las letras, que son terriblemente conservadoras. En esa música, que es sobre todo de movimiento, hay un espesor humano, una espcie de ausencia de malicia y algo muy efímer que pasa cuando los cuerpos se mueven olividándose de que son frágiles, sí, hay algo que me conmueve...
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1 commentaire:
Pienso igual que tú, aunque a mi me pasa igual con el cine. No sé que haría si no existieran las películas, un alto porcentaje de mi salario se me va en comprar películas e ir al cine.
Cuando un buen film y una buena música se unen, pocas cosas son mejores. Un ejemplo de esa unión que en verdad resultó magistral? «Trois coulores. Bleu» de Krzysztof Kieslowski. Ahí, la sensibilidad del gran director polaco se fundió y vió sublimada, con la maravillosa música de su paisano Zbigniew Preisner y la exquisita actuación de Juliette Binoche.
Saludos
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