Es increíble cómo dependemos de la mirada de los demás, eso hace de nosotros seres netamente sociales, necesitados del afecto. Una mirada que nos reconozca puede sacar lo mejor de nosotros mismoas. Esa mirada de reconocimiento empieza en la infancia, con la familia y los amigos y se va fortaleciendo con los años. A las mujeres y a todas las minorías nos toca afrontar una mirada inquisidroa de la sociedad y de las personas de nuestro propio género, pero también a los hombre sque tienen que afrontar esa distancia, ese vacío que los separa de nosotras, las mujeres. Es una lucha constante entre lo que seremos o creemos ser y lo que los demás esperan de nosotroas. Hay miradas que nos esconden de nostroas mismoas.... En ese sentido, me digo que algunas expriencias pobres terminan empobreciéndonos. No debemos dejar ganar esa batalla. Cada unoa de nosotroas tiene un tesoro dentro, solo hace falta la luz que lo ilumine Siempre he confiado más que desconfiado más que desconfiado de las personas. Todo depende de la luz que arrojemos sobre ellas. por eso, me duele mucho cuando ua experiencia saca lo peor de mí, cuando mi pequeña sabiduría, la de confiar, se va al traste. Muchas veces cedemos y aceptamos esa imagen desfigurada de nosotroas porque nunca podemos ser idéndticoas sino siempre cambiantes, lo importante es que nuestro encaje, nuestra garantía mínima de espiritualidad, no se estropee. Leo el libro sobre Elena Garro y hay algo que me sorprende, su amargura. Hablar d euna relación amor-envidia con Octavio Paz. Deja un desazón, una pena porque el amor podría ser la mejor manifestación de generosidad aunque sea muy difícil trascender nuestro epqueño ego y lo más frecuente es que no soportemos la felicidad del Otroa. Yo no quisiera envejecer así, no. Yo creo que sinos quejamos de desafecto es porque no hemos sabido estar ahí, creo que la responsabilidad es de cada unoa, ninguna fuerza superior nos hace, somos nosotroas las que marcamos nuestro destino, loas que interpretamos lo que sucede de manera vital o de forma negativa atribuyéndole un valor predistigitador, con superstición.
La única fatalidad es no saber, o no estar en condiciones, de interpretar lo que nos sucede, En eso, la pobreza material influye mucho porque la subsistencia es concreta y no reflexiva, ni tampoco noble.
Por es, cada día deberíamos pedirnos, interiormente, que ojalá que la vida nos deje ser mejores y saber vivir sin lamentos, que no os exponga demasiado y si sucede, que sepamos responder, simplemente en estado contemplativo, en la acción sí, pero creativa, para generar nuevas ideas, nuevos contenidos y formas de sentir. Ser un sujeto, indivisible, no una cosa, ni solamente un alma, sino una persona, viviente y vivida, hablante y hablada, un yo:tú. Mi apuesta va por ahí.
Todas las cosas que no decimos, por miedo, las que no aceptamos, las qe ignoramos.... alguna vez, deberíamos decirlas....
canción de Francoise HARDY. La letra nos habla, escúchenla...
http://fr.youtube.com/watch?v=HCzoYRYu5wE
La única fatalidad es no saber, o no estar en condiciones, de interpretar lo que nos sucede, En eso, la pobreza material influye mucho porque la subsistencia es concreta y no reflexiva, ni tampoco noble.
Por es, cada día deberíamos pedirnos, interiormente, que ojalá que la vida nos deje ser mejores y saber vivir sin lamentos, que no os exponga demasiado y si sucede, que sepamos responder, simplemente en estado contemplativo, en la acción sí, pero creativa, para generar nuevas ideas, nuevos contenidos y formas de sentir. Ser un sujeto, indivisible, no una cosa, ni solamente un alma, sino una persona, viviente y vivida, hablante y hablada, un yo:tú. Mi apuesta va por ahí.
Todas las cosas que no decimos, por miedo, las que no aceptamos, las qe ignoramos.... alguna vez, deberíamos decirlas....
canción de Francoise HARDY. La letra nos habla, escúchenla...
http://fr.youtube.com/watch?v=HCzoYRYu5wE
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