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jeudi, octobre 11, 2007

Louise Bourgois

Ayer, en El país, visto un artículo sobre la artista francesa que radica en Neuva York, Louise Bourgois quien hace una gra exposición en la Tate Modern, en Londres. Lo que me sorprende es que a su edad, 92 años, tenga tanta vitalidad y que siga hurgando en la relación neurótica que tuvo con su padre. Como no puede trabajar sola y por sus propios medios, trabaja con la ayuda de una persona a la que da indicaciones. Hoy, me entero que Doris Lessing obtuvo el Premio Nóbel, la única persona que no pude conocer en el festival de Berlín, y que tiene una expresión de bondad en el rostro.

Y por la tarde ayer, mientras caminaba por el Zócalo de México, lo que equivale a la Plaza de armas, o la Plaza mayor(sic), como la llaman ahora en Lima, era curisos, me sentía desorientada con la forma como se movía la ciudad, sentía que mi ritmo interno no iba con el el exterior, la sentía ocpada en otras preocupaciones, y em seneíe lejos de ella. Esas relaciones de cercanía, de la alteridad inemdiata hace que todo parezca más sólido y con sentido, entonces, tratamos de acercarnos, lentamente para reconocer los códigos. De noche, La condesa hervía de gente, en los restaurantes y los cafés, otro público, por supuesto, de abundancia, consumidor...

2 commentaires:

Baakanit a dit…

Es bueno saber que Louise aun siga tratando de unir las piezas del rompecabeza de su vida. Así me veré yo si llego a esa edad.

Saludos

XIGGIX a dit…

Umm, la neurosis siempre nos remolca hasta ese primer episodio y si en el presente lo convertimos en arte, bueno, creo que seria una buena manera de trascenderlo...me sucede con frecuencia en esta Lima que crecio, al menos para mi percepcion, demasiado rapido en estos ultimos tiempos, entonces es como si hubiera perdido el ritmo con el entorno y sus habitantes; como le explicaba a un amigo(sin contenido peyorativo en la metafora)que la gente transita por la calles en autos y a pie, con la misma insolita dinamica que emplean las cucarachas al huir cuando se descubre la entrada de su guarida...alguna vez dijo Doris Lessing en una entrevista: "todo el tiempo las cosas de una ciudad son extraordinarias, y no me sorprenderia descubrir que las dimensiones de los edificios nos afectan de manera que ni siquiera imaginamos"...lo que me deshubica en las ciudades, son ese tipo de relaciones yo-ello de las que hablaba Buber, que casi siempre prevalecen en nuestro encuetro con el otro, a diferencia de las relaciones yo-tu que se aprecian mas en los centros poblados mas alejados de las grandes ciudades...intentar sincronizar, descubriendo esos codigos, es la unica manera de recuperar el oxigeno dentro del smog.