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lundi, août 20, 2012

¿para qué educarnos?

Ayer vi una entrevista  a la Ministra de la educación en el Perú, Patricia Salas, en la que hablaba de las reformas que deben hacerse para mejorar la educación en mi  país, una de ellas, la más importante, es la calidad de la enseñanza que reposa en la calidad de los que enseñan. Para esto, la opinión en general está de acuerdo en que loas que enseñan deben pasar una evaluación. Es decir, pasar un examen de prueba de conocimientos generales. Lo que no se dice, con estas medidas que distraen y que son más bien, inquisidoras e humillantes para quienes se someten a ellas, es que si nos e confía en los maestros, es que no se confía en todo el sistema educativo, en realidad, también en la educación superior encargada de formar a estos cuadros. Sucede que la educación es en muchas partes del mundo, considerada como una mercancía. No se aprender para vivir mejor y comprender el mundo en que se vive, se aprende para distinguirse, para pertenecer a una clase privilegiada. La educación es difundida en estos casos como un instrumento de poder y no de comunicación, y en el caso, peruano, de integración social, de bienestar social. Todo tiene un precio, y si se puede ganar con la educación, mejor. Se deja hacer porque no hay, no existe un proyecto, al menos, esa es la impresión que se siente desde afuera. Hemos entrado en la carrera por los diplomas, por los doctorados, sin importar el uso, la importancia del conocimiento como instrumento de autonomía, de formación de individuoas capaces de vivir en grupo en el mundo de ahora. la educación es un motor de búsqueda, una herramienta de intercambio y no una consolidación de prejuicios y valores, que es lo que parece que hace la educación en mi país. No ayuda a pensar con independencia, somete y aliena.

Si un día, si solo un día se decidiese debatir sobre este tema, sería ya una salida. convocar a diferentes ámbitos para lograr perfilar un proyecto viable en el país que vivimos, con sus síntomas de época, con sus desfases históricos y su falta de memoria, que es una manera de mantener en vilo  y paralizada a una población entera.

.....

he leido todo el fin de semana libros y más libros, no puedo, es un vicio, siento que la realidad de los libros puede ser más rica que la misma realidad, salvo excepciones y estar en condiciones de verlo, que los libros son un tesoro, y leí la correspondencia entre Bolívar y Manuela Saenz, dos personas que se encuentran en un punto importante de sus vidas, se escriben, se ayudan, se acompañan, hasta el exilio de Manuela en el norte del Perú. Bolívar muere a los 44 años, y Manuela, llega a una edad avanzada cargada de recuerdos, de ese pasado intenso con el que fue la persona que más contó en su vida. Recuerdo las Ensoñaciones de un paseante solitario, de Rousseau, una cosa que me impactó fue reconocer que solo había tenido 6 años de felicidad en su vida, a través de una persona, ¿tan poco? No sé, será que algunas personas están más dotadas para absorber la savia de la vida, o que en realidad es cierto que pocas veces llegamos a esos picos de intensidad, no lo sé, pero en ambos casos, Manuela y Rousseau, hay esa misma confesión. Manuela escribe: en vida te adoré, muerto, te respeto y venero (sic).--- Idolatría del ser amado que, en este caso, aunque fuese mutua, suena fuera de tiempo, ¿por qué? Porque estamos en una época en que el amor no nos parece un sentimiento absoluto sino fragmentado, en que es casi imposible la atención, en la manera en que la permitía su tiempo, a una sola persona, a una sola voz, a no ser de vivir en autarquía. Para seguir un sentimiento tan fuerte como la pasión amorosa es necesario poder imaginar, y sabemos cuán alienadoas estamos con nuestras necesidades, cuán bombardeadoas estamos con los mensajes exteriores, cuánto agobio y cansancio. Imagino que es descifrar una música en medio de un ruido constante. Exige atención, empeño, osadía, un sentimiento casi épico de la vida, una lucha...

vaya...


4 commentaires:

Rafael Llimós a dit…

Para qué estudiamos?
Para tener títulos, para ser reconocidos por el sistema y así contribuir con el status quo.

Patricia De Souza a dit…

"educarse"=exactamente lo contrario...

Rafael Llimós a dit…

te refieres a educarse de verdad, adquirir una capacidad crítica?

Patricia De Souza a dit…

Parece que no quedó clara la idea.. pues eso, creo que lo dije y es el sentido de este post...