dimanche, juillet 08, 2012
El silencio
Cierto: no he podido escribir en mi blog, problemas de conexión en Francia, en donde el Internet no abunda. Sí, créanlo, hay algunos cafés, algunos restaurantes, pero no es fácil encontrar una buena conexión. Luego, está el problema de la abundancia de experiencias y no poder organizarlas. Es como andar en una feria enorme, perderse en ella, en medio del ruido y el estrépito. Luego, regreso a mí, agotada, voy reptando hasta mi centro. Me digo que soy una persona complicada, me cuesta adaptarme a las cosas más sencillas, interesarme por las mismas cosas que la gente común se interesa, no andar cansada. Me canso rápido y me aburro todavía más rápido. Doy la vuelta enseguida a las cosas y cuento los segundos para estar sola frente a mis ficciones... mnnn... La vida siempre debería darnos tiempo para poder detenernos en lo que vivimos, pero, le movimiento tiene su lado costoso: no poder justamente detenerse. De golpe me digo que la experiencia en Cuba no ha sido recorrida, que esta experiencia, tampoco, que no tengo el tiempo y el Facebook me hace abandonar mi blog, cosa que no quiero y, aunque haya silencio. Sigo aquí.
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2 commentaires:
Me sucede lo mismo en los viajes. Quisiera permanecer varios dias en un solo lugar para tomarme mi tiempo. Demasiados impactos, todo nuevo, me siento alejada de mi centro. Sin embargo la experiencia del viaje me alimenta de otra forma, despierta nuevos intereses, me ensancha el mundo. Lo importante es volver. Muchos saludos desde Lima, Ce
Exacto, dijiste esa palabra "volver", que es regresar a un espacio de inicio, denso...
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